Rúbrica… En llamas, Por Aurelio Contreras Moreno

Rúbrica
En llamas
Por Aurelio Contreras Moreno

La espiral de violencia que consume a México escaló a un nuevo nivel este fin de
semana con el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo Rodríguez, quien
fue ejecutado en público, durante un festival al que acudió una gran cantidad de
personas en pleno centro de esa ciudad michoacana, sin que la supuesta escolta
de 14 elementos de la Guardia Nacional que el gobierno federal dice que tenía
asignados, hiciera nada para protegerlo.
La respuesta oficial fue la misma de siempre. Dijeran por ahí, de manual:
atrincherada en la negación y en lugar de asumir con responsabilidad el más que
evidente deterioro de la seguridad pública en todo el país, la presidenta Claudia
Sheinbaum ha optado por descalificar toda crítica y colocarle el sambenito de
“campaña de odio” o “uso político del dolor”. Algo debe saber de eso, pues ella, su
mentor y su partido se especializaron en hacer eso mismo durante más de dos
décadas.
Pero lo único cierto es que el país se le va de las manos. La realidad es que los
cárteles del crimen organizado han tomado el control de regiones enteras en las
que los alcaldes están bajo amenaza –porque no podría decirse que gobiernan-, y
los ciudadanos viven entre el miedo y la desesperación.
Aunque Sheinbaum defiende en el discurso la fracasada –y criminal- estrategia de
“abrazos, no balazos” de Andrés Manuel López Obrador, la suya, aunque más
frontal contra los delincuentes, no ha dado los resultados necesarios y su gobierno
luce rebasado, reactivo ante la coyuntura y particularmente a las presiones del
gobierno de Estados Unidos, que parece ser su principal preocupación ante las
reiteradas amenazas de una intervención armada directa contra los grupos
delincuenciales.
La reacción presidencial ante el asesinato de Manzo fue tan predecible como
preocupante: condena formal, promesa de “no impunidad”, pero sobre todo y por
delante, críticas a quienes según ella “politizan la tragedia”. Como si el duelo de
comunidades enteras, agobiadas por años de violencia sin freno, fuera una
estrategia electoral –de partidos que prácticamente están fuera de la discusión
pública- y no una exigencia legítima de justicia.
En Michoacán, las protestas contra la ineptitud del gobierno fallido de Alfredo
Ramírez Bedolla fueron acalladas a punta de madrazos, mismos que no tiene las
gónadas de ordenar darle a los sicarios. Y mientras el régimen desacredita las
voces críticas, muchas más comienzan a alzar la suya.
Se ha convocado a una marcha nacional para este 15 de noviembre, en lo que se
adelanta como una movilización masiva de jóvenes hartos de la corrupción, el
autoritarismo, la violencia y la simulación. La protesta, que se viraliza en redes
sociales con símbolos como la bandera pirata del anime “One Piece”, podría
representar, si logra una amplia convocatoria, una ruptura generacional con el
régimen y su discurso.

Por ello la reacción del morenato ha sido tan virulenta: acusaciones de
manipulación y supuestas “campañas millonarias de desprestigio”, llamados a
cancelar la marcha y hasta amenazas de investigar a quienes difunden la
convocatoria en redes sociales. Exactamente todo lo necesario para ahondar más
la brecha con una generación que no se traga tan fácil los cuentos del “pueblo
feliz, feliz, feliz” del nacional populismo gobernante.
Tienen al país en llamas. Y todavía se hacen los dignos.
Abrazos, arrimones y…
Si el grotesco acto de acoso sexual cometido contra la presidenta Claudia
Sheinbaum en pleno centro de la Ciudad de México por un sujeto en aparente
estado alterado fue real, y supuso un descomunal fallo en la seguridad de la titular
del Ejecutivo, es imperdonable y revelaría cuán vulnerable es. Y lo que eso
representa para el resto de la población que no cuenta con sus dispositivos de
protección.
Ahora que si se trató de un montaje para victimizarla y quitarle la narrativa al
asesinato de Carlos Manzo y a la violencia en el país, es todavía peor, pues
reflejaría una falta de escrúpulos detestable. De ella y sus propagandistas.
En cualquier caso, está del carajo.
Email: aureliocontreras@gmail.com
X: @yeyocontreras

Noticias relacionadas