(Foto: Reuters)
Max Verstappen protagonizó un hecho inusual en las segundas prácticas del Gran Premio de Hungría 2025, cuando arrojó una toalla hacia la pista, lo que le trajo a Red Bull una reprimenda por parte de los comisarios de la Fórmula Uno.
El cuatro veces campeón del mundo fue convocado después de la segunda sesión en Hungaroring mientras los comisarios revisaban las pruebas de video.
“Poco después de que el automóvil 1 saliera de su garaje, se observó que el piloto del automóvil 1 (Verstappen) había lanzado una toalla desde de la cabina”, dijeron.
“El piloto explicó que mientras estaba en el garaje, la toalla facial se había deslizado desde su regazo hasta el lado del asiento y el equipo no era consciente de que permanecía en la cabina”.
“Cuando el piloto se dio cuenta de que estaba allí, se desplazó al extremo derecho de la pista e intentó arrojarla lo más lejos posible del automóvil y de la pista”, agregaron.
Sin embargo, la toalla aterrizó en el asfalto y permaneció allí hasta el final de la sesión.
Los comisarios aceptaron que la toalla era más peligrosa dentro que fuera, con el potencial de alojarse en el espacio para los pies e interferir con la capacidad de Verstappen para controlar el automóvil.
También dictaminaron que, por lo tanto, Red Bull había dejado el automóvil en condiciones inseguras, aunque menos graves que dejar un objeto duro en el habitáculo.
