El exgobernador, Jaime Heliodoro «N», El Bronco, fue trasladado del Penal Número 2 de Apodaca al Hospital Metropolitano bajo un protocolo silencioso, esto para ser sometido a estudios médicos.
El Bronco fue atendido en ese nosocomio a las 18:25 de la tarde y se le realizó una resonancia magnética, luego de que los médicos determinaron que era necesaria debido a diferentes molestias de salud.
Según la conclusión de los resultados, se muestran «divertículos colónicos sin evidencia de inflamación al momento del estudio, aterosclerosis, cambios ostreodegenerativos y quiste hepático de aspecto simple».
En búsqueda de información sobre el traslado de su esposo, Adalina Dávalos llegó al Hospital Metropolitano después de las 18:20 horas, acompañada de un familiar y se llevó la sorpresa de que ya lo habían atendido y hasta regresado de nuevo al Penal Número 2 de Apodaca, sin ser informada de ello.
Dávalos se mostró molesta e inconforme con el protocolo y pidió a las autoridades que la mantengan al tanto de los procedimientos y el estado de salud de su marido.
El sentir de la familia es la preocupación de no saber nada, de que las autoridades no nos dicen nada, yo ya lo hice a través del juzgado 5, de la cuestión del amparo de inconformidad por la incomunicación«, comentó.
«No sé nada, ya fui al penal, vengo al hospital, están más informados ustedes que nosotros, que la familia, que los abogados… Nadie sabe nada, ¿cómo lo sacaron? No sé», agregó.
La esposa del ex mandatario estatal acuso de un exceso en la violación de derechos del Bronco e informó que continuará exigiendo justicia a las instancias correspondientes.
Luego de llegar a permanecer por varios minutos en el área de urgencias solicitando información, se le informó que El Bronco ya no estaba ahí.
«Está en exceso la violación de derechos de él, voy a ver quién me da noticias, porque yo ya tengo un papel formal para que se me de información respecto a él», aseveró Dávalos.
