Ya como la primera aerolínea del Estado, la marca Mexicana de Aviación retomó sus vuelos tras su quiebra en 2010, cuando estaba en manos de privados.
La nueva empresa arrancó operaciones con cinco aviones: tres Boeing 737-800 que pertenecían a la Fuerza Aérea y dos Embraer 145, arrendados.
Luis Cresencio Sandoval, titular de la Sedena, anunció que en el primer bimestre de 2024 se incorporarán cinco aviones B737-800 más, que serán arrendados a la compañía SAT Holdings. Anticipó que se negocia con el fabricante Boeing para realizar un pedido de aviones nuevos, que podrían tardar dos años en llegar. “Estamos en espera de las cotizaciones”, señaló.
El vuelo inaugural fue alrededor de las 8:03 horas desde el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles con destino al Aeropuerto Internacional Felipe Carrillo Puerto, en Tulum; sin embargo, tuvo que ser desviado a Mérida debido a la poca visibilidad, pero tras recargar combustible, enfiló hacia su destino inicial en Quintana Roo.
