Con escoltas del Ejército mexicano y de la Guardia Nacional, la empresa Coca-Cola FEMSA comenzó a distribuir sus productos en el municipio de Puente de Ixtla, luego de que la empresa retió sus operaciones el pasado 12 de septiembre por amenazas de extorsión y el secuestro de cuatro camiones cargados con productos de la refresquera, junto con los choferes.
De acuerdo con un comunicado del Gobierno de Morelos, la empresa restableció sus operaciones, pero sólo distribuye los productos, ya que la bodega que tiene instalada en Puente de Ixtla, aún no opera y no hay en la misma camiones que distribuyan los refrescos, los cuales trasladan desde Cuernavaca a dicho municipio de la zona sur.
Según los comerciantes sólo se entregan los productos a tiendas establecidas en el primer cuadro de la ciudad y no a las pequeñas tiendas en las colonias populares, en donde escasean los refrescos de dicha compañía.
Detención clave
El punto de inflexión para que FEMSA aceptara reanudar operaciones en el sur de Morelos, según fuentes de seguridad estatales, estaría relacionado con la captura de Jaime “N”, alias La Parka, de 58 años, identificado como líder de halcones o informantes al servicio de La Familia Michoacana en los municipios de Amacuzac y Puente de Ixtla, además de estar acusado de los delitos de extorsión y privación de la libertad.
Durante su aprehensión se le aseguraron un arma corta calibre 9 milímetros (mm), un rifle calibre 22 mm, una escopeta calibre 12, distintas autopartes de vehículo automotor y 18 bolsas de sustancia sólida cristalina, con las características de metanfetamina, así como una balanza gramera.
