El Gran Premio de Abu Dhabi 2025 regaló una definición más de la categoría reina del automovilismo. Max Verstappen cerró la temporada con una victoria contundente en Yas Marina, seguido por Oscar Piastri. Sin embargo, el gran protagonista fue Lando Norris, quien cruzó la meta en tercer lugar para asegurar, por primera vez en su carrera, el campeonato mundial de Fórmula 1.
Desde la vuelta inicial quedó claro que el británico correría de manera inteligente. Aunque Piastri lo superó en la arrancada, Norris se mantuvo en el tercer puesto clave que necesitaba para proclamarse campeón. Verstappen, por su parte, tomó no soltó el liderato desde la largada y buscó presionar a McLaren para mantener viva la posibilidad matemática de arrebatarle el título al británico.
LA PRESIÓN DE VERSTAPPEN Y EL PAPEL DE LECLERC
Con el paso de las vueltas, la tensión creció. Charles Leclerc se convirtió en la principal esperanza de Verstappen, pues llegó a colocarse a menos de dos segundos de Norris en la lucha por el podio. Un rebase del monegasco habría cambiado por completo la historia del campeonato.
Incluso Verstappen preguntó por radio si Leclerc estaba presionando a Norris, consciente de que cada décima contaba. La FIA también añadió drama al anunciar una investigación sobre una maniobra del británico contra Yuki Tsunoda, aunque finalmente se resolvió sin sanción.
Mientras tanto, estrategias dispares entraban en juego. Piastri lideró buena parte de la carrera sin detenerse, pero el desgaste de neumáticos lo obligó a entrar a pits. Norris también realizó dos paradas estratégicas que lo mantuvieron con ritmo suficiente para defender el podio.
EL PODIO QUE DECIDIÓ EL TÍTULO
A falta de siete vueltas, el panorama estaba prácticamente definido: Norris tenía más de siete segundos de ventaja sobre Leclerc y gestionaba con serenidad el tercer lugar. Verstappen recuperó la punta superando a Piastri, pero ya no tenía margen para comprometer la coronación del piloto de McLaren.
En la vuelta 58 cayó la bandera a cuadros: Verstappen ganó, Piastri terminó segundo y Lando Norris cruzó tercero para consagrarse campeón del mundo por primera vez en su trayectoria. Entre celebraciones, McLaren puso fin a una temporada histórica que culminó con el título más esperado por la afición del piloto británico.
