Fernando Valenzuela Jr. sonríe cuando habla de su padre. Le cuesta ocultar el orgullo y la sorpresa que sintió al enterarse de que Fernando Valenzuela vuelve a estar en la conversación por el Salón de la Fama del Beisbol.
Me mandaron mensajes de gente de Dodgers y de los medios diciendo que mi papá podía entrar al Salón de la Fama. Tuve que preguntar qué era, no sabía lo del comité de veteranos. Me dijeron que ahí están nombres como Roger Clemens y Barry Bonds, pero que todos tienen chance. Pregunté qué posibilidades hay y la respuesta fue que sí hay”, relata el presidente de los Tigres de Quintana Roo, quien acudió a la presentación del torneo Rising Stars.
La noticia reavivó una vieja conversación que el beisbol mexicano siempre tuvo pendiente: ¿por qué El Toro nunca llegó a Cooperstown? Esta vez, el comité que evaluará a los candidatos de la Era Contemporánea sesionará y dará a conocer los resultados el 7 de diciembre en Orlando. En la boleta figuran nombres pesados, aunque pocos con el impacto social y simbólico del sonorense.
El legado detrás de los números
Valenzuela Jr. sabe que la candidatura de su padre va más allá de las estadísticas.
La gente recuerda lo que hizo en los ochentas, lo que representó para MLB, para México y para Latinoamérica. Abrió las puertas para muchos peloteros mexicanos que hoy tienen oportunidad en Grandes Ligas. Esperamos que se pueda dar, porque sería un orgullo para todos”, dijo.
Y es que los números de Valenzuela fueron sólidos, pero su huella fue cultural. Ganador del Cy Young y el Novato del Año en 1981, seis veces All-Star y rostro de los Dodgers durante una década, el zurdo transformó una ciudad. Su llegada desató la “Fernandomanía”, un fenómeno que unió a Los Ángeles con su comunidad latina y cambió la manera en que las franquicias veían al público latino.
Más que un pitcher, Valenzuela fue un puente entre mundos. Desde Etchohuaquila, Sonora, hasta el Dodger Stadium, su figura se volvió sinónimo de orgullo mexicano y constancia silenciosa.
El Toro fue retirado de las papeletas de la Asociación de Cronistas en 2004, cuando apenas alcanzó un 3.8 por ciento de los votos. Dos décadas después, la historia vuelve a ofrecerle una puerta entreabierta. El Comité de la Era Contemporánea se reúne cada tres años para revisar trayectorias que marcaron época desde 1980. En su última sesión, Fred McGriff fue elegido de manera unánime, mientras que Barry Bonds, Roger Clemens y Don Mattingly quedaron fuera.
Valenzuela podría romper esa inercia. Si consigue el 75 por ciento de los votos, será exaltado el 26 de julio de 2025 en una ceremonia que, más que un homenaje, sería un acto de justicia histórica.
Nos hubiera encantado que se hiciera en vida, pero el tiempo es de Dios. No porque él no esté disminuye lo que representa. Es un orgullo y ojalá se dé”, reflexiona su hijo.
En 2023, los Dodgers retiraron el número 34 del mexicano, un gesto que la propia organización definió como una deuda con su legado.
