México cumplió con su tradición de otorgar asilo a personas que se sienten perseguidas en sus países, afirmó el subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Roberto Velasco, respecto al recibimiento de Betssy Chávez en la embajada de México en Perú.
En la rueda de prensa matutina, Velasco destacó que fue el gobierno de Perú el que rompió relaciones diplomáticas con México, sin embargo, se mantienen las relaciones consulares.
La Secretaría de Relaciones Exteriores transmitió al gobierno de Perú que el Gobierno de México otorgó asilo a la señora Betssy Chávez. Naturalmente, además, se entregó una nota con una solicitud para que se otorgue el salvoconducto para que se vaya del país, esto en apego a una larga tradición de asilo diplomático, de asilo político que tiene México, arraigada en nuestra historia y en nuestros principios humanistas, y en apego estricto al derecho internacional.
Rechazamos la decisión que toma el gobierno de Perú de romper relaciones diplomáticas con México, no así relaciones consulares, porque nosotros estamos actuando, como ahí bien se dice, de forma pacífica, con un sentido humanitario y en estricto apego al derecho internacional”, puntualizó Velasco.
El funcionario insistió en que a México le asiste determinar si procede o no el otorgamiento del asilo y no al gobierno de Perú, porque insistió, Chávez lo solicitó por sentirse perseguida por el gobierno peruano.
Se hizo una evaluación por parte de la Secretaría de Relaciones Exteriores y la Secretaría de Gobernación, y se decidió otorgar el asilo a la señora Chávez (…) debido a que ella ha mencionado que ha sido víctima de varias violaciones a sus derechos procesales y a una persecución política.
Esto es una decisión del gobierno de Perú que no compartimos, pero la amistad entre los pueblos de México y Perú continúa”, recalcó Velasco.
