CHAPECÓ.- Hoy se cumple un año del accidente aéreo del 28 de noviembre de 2016, en el que perdieron la vida 71 personas, entre ellos casi todo el plantel del Chapecoense. Y en Chapecó, la ciudad que más sufrió con la tragedia, la gente se prepara para ser parte de un homenaje sobrio, sin llantos sobrecogedores, pero con las emociones todavía a flor de piel.
19 jugadores del Chapecoense perdieron la vida en el accidente aéreo
La historia de Pedro y Juliana, una joven pareja de estudiantes que reside en Chapecó, es significativa del extraño ambiente que se vive en la ciudad brasileña. “Esta semana, Facebook nos avisó a ambos que se cumplía un año de una publicación”, cuenta él, mientras mira su teléfono móvil.
La publicación es del 24 de noviembre de 2016 y los muestra a ellos dos en el Arena Condá, el estadio del Chapecoense, festejando el empate ante San Lorenzo y la clasificación a la final de la Copa Sudamericana.
Faltan palabras para explicar el día más emocionante de mi vida. El Chape sólo nos da orgullo. Listos para la final”, dice el texto que acompaña la publicación.
Un año después, en un bar mientras mira el partido del nuevo Chape, ella explica: “Esta semana es durísima. Ver esos recuerdos en el Facebook, en las redes sociales de todos los amigos… sólo se habló de eso en Chapecó estos días y estamos todos muy conmovidos”, comenta.
Los jugadores que murieron eran gente normal, no eran estrellas. Tantas veces los vi en la calle, en el shopping, y jamás les pedí una foto, era algo tan común. Hoy me arrepiento de no haberlo hecho”, añade nostálgica.
Cuando el avión que trasladaba al plantel del Chape para enfrentarse al Atlético Nacional de Medellín cayó en Colombia, pasadas las 22 horas del 28 de noviembre, en Brasil ya había comenzado el día 29. Por eso, este martes a la medianoche, a la hora en que la tragedia se consumaba, se realizará una vigilia en la ciudad y el miércoles el Arena Condá estará abierto para que los hinchas puedan homenajear a los fallecidos.
Hay luces que nunca se apagan”, reza una pancarta colocada a la entrada de la iglesia de Santo Antonio, la más importante de la ciudad, y en donde se realizará la vigilia.
Desde que sucedió el accidente, el Chapecoense, que perdió 19 jugadores y 12 dirigentes en el siniestro, se tuvo que reconstruir desde cero. Y en lo deportivo, logró hacerlo con éxito.
3futbolistas sobrevivieron: Alan Ruschel, Jackson Follmann y Hélio Zampier Neto
La temporada 2017 termina para el club del sur de Brasil con una meritoria clasificación a la Copa Sudamericana (con posibilidades de Libertadores), además del título estadual obtenido en abril, el reconocimiento que obtuvo en el mundo y una gira por Europa, impensada años atrás, que lo llevó a jugar ante Roma y Barcelona.
Por el lado de los tres futbolistas que sobrevivieron a la tragedia, las noticias son buenas. Alan Ruschel ya volvió a jugar al futbol en el primer equipo del Chape, Jackson Follmann es embajador del club y se casó, y Neto planea su vuelta a las canchas para 2018.
Entre las historias se habla del Ángel del Chapecoense, el niño colombiano que vivía muy cerca de donde cayó el avión y ayudó con las tareas de rescate.
Así, entre la melancolía por los que ya no están y la felicidad por la superación de los que sobrevivieron, una ciudad expectante se prepara para homenajear a aquellos atletas y dirigentes que la pusieron en el mapa de Brasil y del mundo.
Homenaje
Exitoso en lo deportivo e incierto en lo institucional, el futuro del Chapecoense se avecina complejo. Pero esta semana será el pasado que se hará carne en el presente. Un club con tres tiempos, un año después, el Chape homenajea a sus héroes en una ciudad que los llora al mismo tiempo que los celebra.